Ya has llegado a la semana 30 del embarazo, cada vez acercándote más al parto y más lejos de cuándo sentiste por primera vez a tu bebé cerca de la semana 20 del embarazo. Debes sentirte muy emocionada porque cada día estás más cerca de conocer a tu bebé. Pero, posiblemente esta emoción no sea plena, por los síntomas molestos que han estado apareciendo nuevamente.
Queremos que tu embarazo, sea una etapa que vivas feliz y recuerdes con mucho amor toda la vida. Por esto, te ayudaremos a entender por qué vuelven algunos síntomas clásicos del inicio de la gestación. También te daremos tips para aliviarlos.
En esta semana, el ciclo de síntomas parece querer repetirse, trayendo de nuevo el malestar de las primeras semanas. A continuación, te explicaremos las causas más importantes:
Dependiendo de la etapa del embarazo se presentan cambios en los niveles de hormonas. Estos se relacionan directamente con los síntomas comunes de cada fase. En la semana 30 del embarazo, las fluctuaciones frecuentes de las hormonas pueden producir síntomas como náuseas y vómito. Además, prolongan el tiempo que tarda la comida en pasar por el estómago, pudiendo generar reflujo y sensación de acidez (Shah, 2024).
También, pueden producir síntomas emocionales como alteraciones de humor, dificultades para dormir, sueños extraños y fatiga. Los cambios de humor también pueden estar asociados al estrés de que ya estás más cerca de la fecha probable de parto (The Bumps Editors, 2024; Sedicias, 2024).
Tu bebé continúa creciendo, alcanzando 38.5 centímetros de la cabeza a los pies y 1.4 kg de peso aproximadamente. Junto con él crece el espacio dónde se encuentra dentro de tu barriga. De esta forma, tienes que cargar el peso generado por tu útero, el líquido amniótico y tu bebé. Esto, sumado a que tu bebé se mueve con mucha más fuerza dentro de ti, también contribuye a tus síntomas e incomodidad (The Bumps Editors, 2024; Sedicias, 2024; Shah, 2024).
El gran tamaño de tu útero ejerce presión sobre diferentes órganos ocasionando molestias. Por ejemplo, esta presión sobre el sistema digestivo contribuye a que tengas náuseas, acidez, gases y estreñimiento. Por otro lado, el peso y la ubicación de tu bebé cerca de las costillas producen fatiga, dificultad para dormir y falta de aliento. Incluso, la presión sobre la vejiga puede hacer que siempre tengas ganas de ir al baño o se te escape la orina (The Bumps Editors, 2024; Sedicias, 2024; Shah, 2024).
En resumen, no hay una causa específica para cada uno de los síntomas molestos que puedes presentar. En la semana 30 del embarazo las variaciones hormonales y el crecimiento de tu bebé son las más influyentes. Como ves, es parte natural de tu embarazo, pero no te preocupes porque te diremos qué hacer para sentirte mejor.
Algunas recomendaciones para sentirte mejor durante esta semana son (The Bumps Editors, 2024; Sedicias, 2024; Shah, 2024):
Ten presente que finalizando esta semana estarás a menos de 10 semanas del nacimiento de tu bebé. Ya empiezas a contar los días para la llegada de este pequeño miembro a la familia y así poder iniciar tu maternidad. No dejes que esta emoción se empañe por las molestias que puedes sentir en tu cuerpo. Aplica las recomendaciones que te hemos dado y todo lo que has aprendido a lo largo de tu embarazo.
Recuerda que, si bien puedes presentar algunos síntomas en esta semana, no deben ser demasiado incapacitantes. Si consideras que son exagerados o tienes alguna duda, no esperes para consultar a tu médico. Él determinará si es lo esperado para este momento y te dará consejos personalizados para sobrellevarlos o te indicará si amerita algún estudio o intervención adicional.
Tu médico es tu aliado. Hablar con él te ayudará a sentirte mejor, más tranquila y seguir disfrutando el tiempo que te queda de embarazo.
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