Es normal que durante tu primer embarazo tengas dudas sobre el parto natural. Existe mucha información que puede preocuparte. Por esa razón, te contamos acerca del proceso, para que disfrutes cada paso de este momento tan importante en tu vida.
El término parto natural se refiere a la vía vaginal. En algunas ocasiones, también se usa para hacer referencia al parto sin uso de anestesia o analgésicos.
Como su nombre lo indica, es la manera natural de dar a luz. El cuerpo de las mujeres está diseñado para superar este proceso, por lo que presenta múltiples ventajas, las principales son:
Se puede dividir en 3: dilatación, expulsión y alumbramiento (Artal-Mittelmark, 2021).
Aquí se da la dilatación del cuello uterino, esta se divide en 2 fases (Artal-Mittelmark, 2021):
Aquí se da el nacimiento del bebé. Suele durar entre 1 y 2 horas y es el momento donde tendrás que pujar. Según las normas del centro donde decidas dar a luz, podrías tener la oportunidad de probar diferentes posiciones al momento de empezar los pujos. Estas son: en cuclillas, sentada, de rodillas o sobre manos y rodillas (Artal-Mittelmark, 2021; Mayo Clinic, 2022).
Empieza después del nacimiento del bebé hasta la expulsión de la placenta, suele durar un máximo de 30 minutos. Durante este tiempo seguirás teniendo contracciones leves, menos dolorosas y continuas. Esto ayudará a la expulsión de la placenta y a minimizar el sangrado. Posteriormente, inicia la etapa llamada puerperio (Artal-Mittelmark, 2021).
En la primera etapa, durante la fase inicial las molestias son mínimas. En la segunda fase del parto natural el dolor es más intenso y puede provocar deseos de pujar. Recuerda esperar la indicación de tu médico para hacerlo.
A menos que te indiquen estar acostada, puedes aliviar un poco el dolor con cambios de posición. Por ejemplo, rueda sobre una pelota de goma grande, toma una ducha caliente, camina y detente a respirar durante las contracciones o realiza un masaje suave entre contracciones (Mayo Clinic, 2022).
En algunos hospitales podrás planificar el alivio del dolor con tu médico, en este caso podrás escoger entre el uso de analgésicos o algún tipo de anestesia. Una de las opciones más usadas es la epidural, cabe destacar que este procedimiento no impedirá que realices un buen pujo (Artal-Mittelmark, 2021).
En caso de que decidas no solicitar medicamentos; existen técnicas que puedes emplear para el alivio del dolor. Estas son útiles sobre todo en la primera y segunda etapa del parto, por ejemplo (KidsHealth, 2016):
Lo más importante es mantener la calma, pues se considera que la necesidad de analgésicos y anestesia se relaciona con el grado de ansiedad que presentes durante el acontecimiento (Artal-Mittelmark, 2021).
Antes del parto natural puedes tomar clases prenatales, con el fin de aprender técnicas de relajación. Además, podrás obtener la información necesaria acerca de este proceso. Esto puede contribuir a disminuir tu ansiedad durante el gran día.
Recuerda que este proceso puede ser muy intenso, pero tu cuerpo sabrá responder adecuadamente en ese momento. Si te sientes temerosa, no dudes en hablarlo; busca apoyo en tu pareja, familiares o amigas. Recuerda que debes estar alerta a las señales de depresión posparto. ¡Prepárate para disfrutar al máximo de esta primera cita con tu hermoso bebé!
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